- La primera servirá para ver como aumenta la saturación del color con cada capa de acuarela: un rectángulo dividido en cuadritos, de forma que en cada cuadro iremos añadiendo una capa nueva de acuarela para conseguir una especie de degradado.
- La segunda consiste en un rectángulo pintado de acuarela sobre el que iremos añadiendo capas de color sobre seco, para ver como se mezclan los colores ópticamente en el papel.
- La tercera es igual que la anterior, pero en lugar de pintar sobre el rectángulo seco, lo haremos sobre húmedo para estudiar la diferencia.
Cuando pintamos sobre seco conseguimos que los colores se mezclen ópticamente, mientras que si lo hacemos sobre húmedo, la mezcla es física, uniéndose los bordes. Los resultados son muy distintos y hay que saber dominarlos muy bien para pintar con acuarela.
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